sábado, 28 de febrero de 2015

El Riachuelo: la "bomba de tiempo" de uno de los ríos más contaminados del mundo

El Riachuelo de Buenos Aires representa una amenaza ecológica y una crisis social para millones de personas. BBC Mundo lo navegó y recorrió sus orillas.

El Riachuelo de Buenos Aires ostenta un título tan repulsivo como el hedor que desprende y que inunda los barrios por los que cruza: es el río más contaminado de Argentina y uno de los cinco con mayores niveles de polución del planeta.

En su recorrido de apenas 64 kilómetros, el Matanzas-Riachuelo -como se llama- lleva mucho más que agua: mercurio, cadmio y una larga lista de metales pesados, casi 9.000 toneladas de chatarra, barro contaminado hasta un metro por debajo del lecho.

Las dioxinas carcinogénicas, que no se ven, y el humo, que sí, completan un paisaje devastado a apenas tres kilómetros del centro de la capital argentina.

La zona de la cuenca alberga además al 15% de los habitantes del país- agrupados en asentamientos y villas de emergencia donde el índice de pobreza alcanza 45%. El 35% carece de agua potable.

La limpieza del Riachuelo es una mancha negra en el historial ecológico de los últimos gobiernos. Los US$250 millones que entregó el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en 1998 se esfumaron hace rato y sólo una tercera parte de aquel dinero se usó para el fin con el que había sido dado.

Ahora, y tras un inédito fallo de la Corte Suprema en 2008 que conminó al Estado a sanear el río. Un préstamo de US$840 millones del Banco Mundial deberá invertirse en la titánica tarea.

Hace unas semanas, fue nombrado un nuevo ministro de Medio Ambiente, Juan José Mussi, que señaló que colocará al Riachuelo entre sus prioridades. Tiene un plazo perentorio: el 1 de febrero, según determinó la justicia, deberá presentar un plan para erradicar viviendas precarias de las márgenes del río.


Navegando aguas muertas

No es fácil adivinar su estado real cuando se mira el Riachuelo desde el barrio de La Boca, junto al pintoresco pasaje Caminito que fotografían anualmente millones de visitantes. Para lavarle la cara, unas barreras de contención ubicadas a un kilómetro de ese punto turístico retienen los residuos flotantes.



Pero basta navegarlo para descubrir que lo que hay allí es río muerto. Sin oxígeno ni fauna, con valores de contaminación cuatro veces por encima del máximo establecido por la Organización Mundial de la Salud.

Contaminación en el Riachuelo.

"Contaminación en el Riachuelo."

Basta también mirar las orillas para entender las causas: un complejo industrial denso y vetusto que vierte desechos sin control ni tratamiento.

"Cuando la Corte Suprema dictó el fallo en 2008, se hizo un censo de industrias radicadas en la cuenca y se estableció un listado de 4.100, aunque todo el mundo sabe que hay de 20.000 a 30.000. Deberían haberlas inspeccionado todas en 180 días, pero en dos años se revisó menos del 40%", denunció Félix Cariboni, de la organización Greenpeace, durante un recorrido en bote con BBC Mundo.

"(Hay) carencia de tecnologías limpias (...), externalización de los costos al ambiente y existencia de establecimientos clandestinos", enumeró en un informe Javier García Espil, experto de la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN).



Olvidados en la orilla

La crisis del hábitat es sólo una de las caras del problemático Riachuelo. La Corte lo puso por escrito: lo que urge es mejorar la calidad de vida de los habitantes de la cuenca.

Las "villas miseria" se erigen entre basurales a cielo abierto, donde se depositan desechos sólidos de las fábricas y residuos de los locales, a los que las autoridades no proveen servicio de recolección. Son el patio de juego de cientos de niños y ratas a plena luz del día.

Según un estudio de la Defensoría del Pueblo, en 2010 el número de espacios de depósito de residuos pasó de 141 a 217.

Las enfermedades y la muerte acechan desde el agua y las orillas: bronquitis, alergias, alteraciones neurológicas, cáncer y metahemoglobinemia, una rara dolencia sanguínea que aquí se ha hecho endémica. La mortalidad infantil es de más del doble que en otros partidos bonaerenses.

"Tenemos mucho cáncer, mucho más que antes. Hay vecinos con problemas de leucemia, enfermedades en la piel, casos de hepatitis fulminante... cada vez peor", señaló Adriana Gónzález, que lleva 14 años en Villa Lamadrid.
"Contaminación en el Riachuelo. " 

La Acumar también corre contra el reloj. Tiene plazos por cumplir, informes que entregar a la justicia y un área de 2.230 km2 alrededor del río para sanear.

Según su presidente ejecutivo, Gustavo Villa Uría, en un trabajo conjunto con cooperativas de la zona, en cuatro meses de 2010, removieron unas 70.000 toneladas de basura.

Pero el crecimiento poblacional atenta contra su cruzada: para las autoridades, el surgimiento de nuevos focos de contaminación está relacionado con la instalación de más viviendas precarias.

Para algunas voces críticas, además, la tarea de remoción de residuos de las márgenes resulta insuficiente.

"Lo dramático es cómo el poder político le da importancia a lo visual o cosmético (...). Pero con cuestiones de fondo como la eliminación de basurales y la contaminación fabril, los gobiernos no hacen nada", reclamó Alfredo Alberti, miembro de la Asociación de Vecinos de La Boca

Con el Plan Integral de Saneamiento Ambiental 2009, la Acumar promete llevar la misión más allá.

Hacer, por ejemplo, el tendido cloacal que el 55% de la población local espera desde hace 40 años o revisar sistemas de potabilización del agua.

"Lo estamos corrigiendo, pero los tiempos de la obra pública y las tareas de infraestructura son más largos que la decisión política", justificó Villa Uría. ¿Cuánto más largos? Respondió el funcionario: "limpiar el Riachuelo puede llevar 10 o 15 o 50 años más".

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viernes, 20 de febrero de 2015

El Poder de la Mente Subconsciente‏




Existe una antigua disciplina llamada La Ciencia de la Mente, basada en que nosotros tenemos el potencial de atraer hacia nuestras vidas todas las experiencias positivas que uno desee, desde gozar de buena salud y prosperidad económica, hasta disfrutar de las mejores relaciones con nuestros seres queridos, si así uno LO DECRETA.

Según los principios de esta ciencia que combina conceptos de la psicología con las leyes básicas de la espiritualidad, cada persona es literalmente el resultado de sus pensamientos y de cómo estos influyen en su mente subconsciente. En otras palabras, muchas de las condiciones que imperan en la vida, como la salud, las relaciones afectivas o la economía, son el resultado directo de cómo se utiliza el poder de la mente subconsciente, y esta es la parte que según ellos, se le debe prestar mucha atención, porque todos sin exepción utilizamos ese poder, solo que hay quienes saben usarlo correctamente y recogen beneficios.

Según el doctor Joseph Murphy, autor de "El poder de la mente subconsciente", el ser humano tiene una sola mente que se divide en dos partes, cada una con sus propios atributos y poderes: la mente consciente y la subconsciente.

La primera es la que piensa, razona y mantiene un monólogo interior constante con el propio yo: “Tengo que comprar pan…. Creo que mi amiga me odia…. Comienzo a sentirme engripada…. ..Quiero comprarme ese vestido pero no está a mi alcance”, etc.

La segunda se encarga de todas las funciones biológicas automáticas, o que están fuera de nuestro control consciente: hacer que el corazón lata normalmente, que la sangre circule por el cuerpo, etc. Al mismo tiempo, explica el doctor Murphy, la mente subconsciente no piensa ni razona por si misma, sino que se limita a aceptar los dictados de la mente consciente y a trabajar si son positivos o negativos.

Es por eso, que si una persona dice con total convicción: “Soy enfermiza” la mente subconsciente comienza a crear las condiciones necesarias para convertir ese pensamiento en realidad. De la misma manera si cree a cabalidad : “Soy capaz de vencer todos los obstáculos profesionales (por ejemplo) que se me presenten”, el subconsciente obedece esta orden y trabaja para ejecutarla y que sea así.

El profesor Murphy asemeja la mente subconsciente a un jardín que vamos a sembrar. Los pensamientos son las semillas, si sembramos tomates, no esperaremos recoger rosas. Precisamente por creer una cosa y esperar otra, es que las personas sufren innecesariamente, pues no entienden este principio.

Debemos cambiar el lema de “ver para creer” por el de “creer para ver”. Aquí es cuestión de fé, o sea, de convencernos de que lo que nosotros querramos o decretemos sucederá.

Ejemplo: Si vas a una entrevista de trabajo con el convencimiento absoluto y total de que causarás una mala impresión, eso es lo que decretas , y la mente subconsciente se encargará de que sea así.

La mente trabaja creando en tu mundo exterior, lo que crees en tu mundo interior. No debemos ponerle límites a lo que recibimos de un Universo ilimitado, según explica el estudio, somos un imán que atrae exactamente lo que espera de la vida. No es magia, es cambiar las formas de concebir nuestras ideas y pensamientos.

Pasos para programar la mente:

1- Ser positivo. Si piensas: “No puedo”, hay que cancelar inmediatamente ese pensamiento y afirmar con convicción: “Yo sí puedo”.

2- Crear las afirmaciones que expresen nuestros deseos de forma positiva. Nunca digas: “No tengo sobrepeso”, porque la mente no entiende la palabra “no” y solo escucha “tengo sobrepeso”. Se debe afirmar: “Yo, mantengo un peso saludable”. Las afirmaciones se deben repetir en silencio varias veces al día, y escribirlas por lo menos 10 veces durante 21 días consecutivos.

3- Antes de dormir y justo al despertar, cuando la mente está con ondas más lentas y receptivas, visualizar exactamente lo que deseamos, como si estuviéramos viendo una película. Tratar de sentir la emoción, como paz, alegría o felicidad que uno desea atraer a su vida.

4- Si existe un problema o una pregunta a la que no le encontramos solución, debemos dejar que la mente subconsciente por medio de enfoques positivos que le suministramos, nos dé la solución, que a veces aparece de modo inesperado.

5- Evitar las quejas, pues solo encierran negatividad. Mantener una actitud positiva, no significa ignorar los problemas y desafíos de la vida, sino que los vemos como una oportunidad para aprender y una lección para mejorar.




Cuéntame cómo pasó...


Ahorrar agua


La calidad del agua en el mundo


miércoles, 11 de febrero de 2015

MÉTODO MONTESSORI





LOS PRINCIPIOS BÁSICOS DE LA METODOLOGÍA MONTESSORI


«Nadie puede ser libre a menos que sea independiente; por lo tanto, las primeras manifestaciones activas de libertad individual del niño deben ser guiadas de tal manera que a través de esa actividad el niño pueda estar en condiciones para llegar a la independencia». María Montessori

1. La mente absorbente de los niños

La mente de los niños posee una capacidad maravillosa y única: la capacidad de adquirir conocimientos absorbiendo con su vida psíquica. Lo aprenden todo inconscientemente, pasando poco a poco del inconsciente a la conciencia, avanzando por un sendero en que todo es alegría. Se les compara con una esponja, con la diferencia que la esponja tiene una capacidad de absorción limitada, la mente del niño es infinita. El saber entra en su cabeza por el simple hecho de vivir. Se comprende así que el primer período del desarrollo humano es el más importante. Es la etapa de la vida en la cual hay más necesidad de una ayuda, una ayuda que se hace no porque se le considere un ser insignificante y débil, sino porque está dotado de grandes energías creativas, de naturaleza tan frágil que exigen, para no ser menguadas y heridas, una defensa amorosa e inteligente.

2. Los períodos sensibles

Los períodos sensibles son períodos en los cuales los niños pueden adquirir una habilidad con mucha facilidad. Se trata de sensibilidades especiales que permiten a los niños ponerse en relación con el mundo externo de un modo excepcionalmente intenso, son pasajeras y se limitan a la adquisición de un determinado carácter.

3. El ambiente preparado

Se refiere a un ambiente que se ha organizado cuidadosamente para el niño, diseñado para fomentar su auto-aprendizaje y crecimiento. En él se desarrollan los aspectos sociales, emocionales e intelectuales y responden a las necesidades de orden y seguridad. Las características de este Ambiente Preparado le permiten al niño desarrollarse sin la asistencia y supervisión constante de un adulto. El diseño de estos ambientes se basa en los principios de simplicidad, belleza y orden. Son espacios luminosos y cálidos, que incluyen lenguaje, plantas, arte, música y libros. El salón (o la clase) es organizado en áreas de trabajo, equipadas con mesas adaptadas al tamaño de los niños y áreas abiertas para el trabajo en el suelo. Estanterías con materiales pertenecientes a dicha área de desarrollo rodean cada uno de estos sectores. Los materiales son organizados de manera sistemática y en secuencia de dificultad.

4. El Rol del Adulto

El rol del adulto en la Filosofía Montessori es guiar al niño y darle a conocer el ambiente en forma respetuosa y cariñosa. Ser un observador consciente y estar en continuo aprendizaje y desarrollo personal. El verdadero educador está al servicio del educando y, por lo tanto, debe cultivar la humildad, para caminar junto al niño, aprender de él y juntos formar comunidad.

EL APRENDIZAJE INFANTIL PARA MARÍA MONTESSORI

El nivel y tipo de inteligencia se conforman fundamentalmente durante los primeros años de vida. A los 5 años, el cerebro alcanza el 80% de su tamaño adulto. La plasticidad de los niños muestra que la educación de las potencialidades debe ser explotada comenzando tempranamente. Los conocimientos no deben ser introducidos dentro de la cabeza de los niños. Por el contrario, mediante la información existente los conocimientos deben ser percibidos por ellos como consecuencia de sus razonamientos. Lo más importante es motivar a los niños a aprender con gusto y permitirles satisfacer la curiosidad y experimentar el placer de descubrir ideas propias en lugar de recibir los conocimientos de los demás. Permitir que el niño encuentre la solución de los problemas. A menos que sea muy necesario, no aportar desde afuera nuevos conocimientos. Permitir que sean ellos los que construyan en base a sus experiencias concretas. Con respecto a la competencia, este comportamiento debía ser introducido solo después de que el niño tuviera confianza en el uso de los conocimientos básicos. Entre sus escritos aparece: «Nunca hay que dejar que el niño se arriesgue a fracasar hasta que tenga una oportunidad razonable de triunfar». Consideraba que no se podían crear genios pero sí, darle a cada individuo la oportunidad de satisfacer sus potencialidades para que sea un ser humano independiente, seguro y equilibrado. Otro de sus conceptos innovadores fue que cada niño marca su propio paso o velocidad para aprender y esos tiempos hay que respetarlos.

LA IMPORTANCIA DE LOS MATERIALES DIDÁCTICOS



María Montessori elaboró un material didáctico específico que constituye el eje fundamental para el desarrollo e implantación de su método. No es un simple pasatiempo, ni una sencilla fuente de información, es más que eso, es material didáctico para enseñar. Están ideados a fin de captar la curiosidad del niño, guiarlo por el deseo de aprender. Para conseguir esta meta han de presentarse agrupados, según su función, de acuerdo con las necesidades innatas de cada alumno. Estos materiales didácticos pueden ser utilizados individualmente o en grupos para participar en la narración de cuentos, conversaciones, discusiones, esfuerzos de trabajo cooperativo, canto, juegos al aire libre y actividades lúdicas libres. De esta forma asegura la comunicación, el intercambio de ideas, el aprendizaje de la cultura, la ética y la moral. En general todos los materiales didácticos poseen un grado más o menos elaborado de los cuatro valores: funcional, experimental, de estructuración y de relación. Otra característica es que casi todo el equipo es autocorrectivo, de manera que ninguna tarea puede completarse incorrectamente sin que el niño se dé cuenta de ello por sí mismo. Una tarea realizada incorrectamente encontrará espacios vacíos o piezas que le sobren. El niño realiza cosas por sí mismo, los dispositivos simples, y observa las cosas que crecen (plantas, animales), abren su mente a la ciencia. Los colores, la pintura, papeles de diferentes texturas, objetos multiformes y las figuras geométricas de tres dimensiones las incitan a la expresión creativa. Los materiales sensoriales están agrupados por cada sentido


El gusto y el olfato. Las plantas y los perfumes proporcionan la gama de los olores. Aquí el material está constituido naturalmente por productos culinarios, con el complemento de una serie de botes con sustancias olorosas, otra serie idéntica ha de ser clasificada por comparación, de manera que se pueda asegurar el reconocimiento exacto de los olores.

El tacto. Tiene en cuenta el material Montessori el sentido táctil, en todas sus formas (tablillas y rugosidades), así como el sentido térmico (botellas con agua a diferentes temperaturas), la percepción de las formas, etc.

La vista. Percepción diferencial de las dimensiones, colores, volúmenes y formas.

El oído. Discernimiento de los sonidos con cajas metálicas, campanillas, silbatos y xilófonos.

«El niño, con su enorme potencial físico e intelectual, es un milagro frente a nosotros. Este hecho debe ser transmitido a todos los padres, educadores y personas interesadas en niños, porque la educación desde el comienzo de la vida podría cambiar verdaderamente el presente y futuro de la sociedad. Tenemos que tener claro, eso sí, que el desarrollo del potencial humano no está determinado por nosotros. Solo podemos servir al desarrollo del niño, pues este se realiza en un espacio en el que hay leyes que rigen el funcionamiento de cada ser humano y cada desarrollo tiene que estar en armonía con todo el mundo que nos rodea y con todo el universo». María Montessori.



lunes, 9 de febrero de 2015

El harakiri - Mario Vargas Llosa


Los caballeros japoneses ya no se suicidan, pero el ritual de la inmolación se mantiene intacto y ahora es colectivo. Lo han practicado países como Argentina y Venezuela, y ahora le toca a Grecia.






El harakiri es una noble tradición japonesa en la que militares, políticos, empresarios y a veces escritores (como Yukio Mishima), avergonzados por fracasos o acciones que, creían, los deshonraban, se despanzurraban en una ceremonia sangrienta. En estos tiempos, en que la idea del honor se ha devaluado a mínimos, los caballeros nipones ya no se suicidan. Pero el ritual de la inmolación se mantiene en el mundo y es ahora colectivo: lo practican los países que, presa de un desvarío pasajero o prolongado, deciden empobrecerse, barbarizarse, corromperse, o todas esas cosas a la vez.

América Latina abunda en semejantes ejemplos trágicos. El más notable es el de Argentina, que hace tres cuartos de siglo era un país del primer mundo, próspero, culto, abierto, con un sistema educativo modélico y que, de pronto, presa de la fiebre peronista, decidió retroceder y arruinarse, una larga agonía que, apoyada por sucesivos golpes militares y una heroica perseverancia en el error de sus electores, continúa todavía. Esperemos que algún día los dioses o el azar devuelvan la sensatez y la lucidez a la tierra de Sarmiento y de Borges.

Otro caso emblemático del harakiri político es el de Venezuela. Tenía una democracia imperfecta, cierto, pero real, con prensa libre, elecciones genuinas, partidos políticos diversos, y, mal que mal, el país progresaba. Abundaban la corrupción y el despilfarro, por desgracia, y esto llevó a una mayoría de venezolanos a descreer de la democracia y confiar su suerte a un caudillo mesiánico: el comandante Hugo Chávez. Hasta en ocho oportunidades tuvieron la posibilidad de enmendar su error y no lo hicieron, votando una y otra vez por un régimen que los llevaba al precipicio. Hoy pagan cara su ceguera. La dictadura es una realidad asfixiante, ha clausurado estaciones de televisión, radios y periódicos, llenado las cárceles de disidentes, multiplicado la corrupción a extremos vertiginosos —uno de los principales dirigentes militares del régimen dirige el narcotráfico, la única industria que florece en un país donde la economía se ha desfondado y la pobreza triplicado— y donde las instituciones, desde los jueces hasta el Consejo Nacional Electoral, son sirvientes del poder. Aunque hay una significativa mayoría de venezolanos que quiere volver a la libertad, no será fácil: el Gobierno de Maduro ha demostrado que, aunque inepto para todo lo demás, a la hora de fraguar elecciones y de encarcelar, torturar y asesinar opositores no le tiembla la mano.

El harakiri no es una especialidad tercermundista, también la civilizada Europa lo practica, de tanto en tanto. Hitler y Mussolini llegaron al poder por vías legales y buen número de países centroeuropeos se echaron en brazos de Stalin sin mayores remilgos. El caso más reciente parece ser el de Grecia, que, en elecciones libres, acaba de llevar al poder —con el 36% de los votos— a Syriza, un partido demagógico y populista de extrema izquierda que se ha aliado para gobernar con una pequeña organización de derecha ultranacionalista y antieuropea. Syriza prometió a los griegos una revolución y el paraíso. En el catastrófico estado en el que se encuentra el país que fue cuna de la democracia y de la cultura occidental tal vez sea comprensible esta catarsis sombría del electorado griego. Pero, en vez de superar las plagas que los asolan, estas podrían recrudecer ahora si el nuevo Gobierno se empeña en poner en práctica lo que ofreció a sus electores.

Aquellas plagas son una deuda pública vertiginosa de 317.000 millones de euros con la Unión Europea y el sistema financiero internacional que rescataron a Grecia de la quiebra y que equivale al 175% del producto interior bruto. Desde el inicio de la crisis el PIB de Grecia ha caído un 25% y la tasa de desempleo ha llegado casi al 26%. Esto significa el colapso de los servicios públicos, una caída atroz de los niveles de vida y un crecimiento canceroso de la pobreza. Si uno escucha a los dirigentes de Syriza y a su inspirado líder —el nuevo primer ministro Alexis Tsipras— esta situación no se debe a la ineptitud y a la corrupción desenfrenada de los Gobiernos griegos a lo largo de varias décadas, que, con irresponsabilidad delirante, llegaron a presentar balances e informes económicos fraguados a la Unión Europea para disimular sus entuertos, sino a las medidas de austeridad impuestas por los organismos internacionales y Europa a Grecia para rescatarla de la indefensión a que las malas políticas la habían conducido.

Syriza proponía acabar con la austeridad y con las privatizaciones, renegociar el pago de la deuda a condición de que hubiera una “quita” (o condonación) importante de ella, y reactivar la economía, el empleo y los servicios con inversiones públicas sostenidas. Un milagro equivalente al de curar a un enfermo terminal haciéndole correr maratones. De este modo, el pueblo griego recuperaría una “soberanía” que, al parecer, Europa en general, la troika y el Gobierno de la señora Merkel en particular, le habrían arrebatado.


Lo mejor que podría pasar es que estas bravatas de la campaña electoral fueran archivadas ahora que Syriza ya tiene responsabilidades de gobierno y, como hizo François Hollande en Francia, reconozca que prometió cosas mentirosas e imposibles y rectifique su programa con espíritu pragmático, lo cual, sin duda, provocará una decepción terrible entre sus ingenuos electores. Si no lo hace, Grecia se enfrenta a la bancarrota, a salir del Euro y de la Unión Europea y a hundirse en el subdesarrollo. Hay síntomas contradictorios y no está claro aún si el nuevo Gobierno griego dará marcha atrás. Acaba de proponer, en vez de la condonación, una fórmula picaresca y tramposa, consistente en convertir su deuda en dos clases de bonos, unos reales, que se irían pagando a medida que creciera su economía, y otros fantasmas, que se irían renovando a lo largo de la eternidad. Francia e Italia, víctimas también de graves problemas económicos, han manifestado no ver con malos ojos semejante propuesta. Ella no prosperará, sin duda, porque no todos los países europeos han perdido todavía el sentido de la realidad.

En primer lugar, y con mucha razón, varios miembros de la Unión Europea, además de Alemania, han recordado a Grecia que no aceptan “quitas”, ni explícitas ni disimuladas, y que los países deben cumplir sus compromisos. Quienes han sido más severos al respecto han sido Portugal, España e Irlanda, que, después de grandes sacrificios, están saliendo de la crisis luego de cumplir escrupulosamente con sus obligaciones. Grecia debe a España 26.000 millones de euros. La recuperación española ha costado sangre, sudor y lágrimas. ¿Por qué tendrían los españoles que pagar de sus bolsillos las malas políticas de los Gobiernos griegos, además de estar pagando ya por las de los suyos?

Alemania no es la culpable de que buen número de países de la Europa comunitaria tengan su economía hecha una ruina. Alemania ha tenido Gobiernos prudentes y competentes, austeros y honrados y, por eso, mientras otros países se desbarataban, ella crecía y se fortalecía. Y no hay que olvidar que Alemania debió absorber y resucitar a un cadáver —la Alemania comunista— a costa, también, de formidables esfuerzos, sin quejarse, ni pedir ayuda a nadie, sólo mediante el empeño y estoicismo de sus ciudadanos. Por otra parte, el Gobierno alemán de la señora Merkel es un europeísta decidido y la mejor prueba de ello es la manera generosa y constante en que apoya, con sus recursos y sus iniciativas, la construcción europea. Sólo la proliferación de los estereotipos y mitos ideológicos explica ese fenómeno de transferencia freudiana que lleva a Grecia (no es el único) a culpar al más eficiente país de la Unión Europea de los desastres que provocaron los políticos a los que durante tantos años el pueblo griego envió al Gobierno con sus votos y que lo han dejado en la pavorosa condición en que se encuentra.

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© Mario Vargas Llosa, 2015.

martes, 3 de febrero de 2015

TÚ PUEDES SANAR TU VIDA - Por Louise L. Hay




Mira la PELÍCULA: https://www.youtube.com/watch?v=b3cmXDkynyE